Unas nubes negras se apoderan de tu cielo azul. Recorren de norte a sur tu península usurpándole su luz al sol, el frescor a las estrellas y el calor a la luna.
Nubes negras que, si de repente se posan al norte, traerán lluvia segura y harán que las neblinas matinales entorpezcan tu nítida visión.
Nubes negras que, si por el contrario se posan al sur, cerrarán el cielo e impedirán el paso del viento que se lleve el calor y el agotamiento.
Nubes negras que, si deciden posarse al oeste, arrastrarán al poniente que secará tu tierra y te dejará sin aire para respirar.
Nubes negras que, si acaban posándose al este, azotarán al mar hasta que lo inunde todo de lágrimas.
Y unas nubes negras que, si finalmente se posan en el
centro, lanzarán millones de agujas que se clavarán en tu corazón y en tu alma.
Verónica Corella
12 de mayo, Día Mundial de la Fibromialgia y Síndrome de Fatiga Crónica
No hay comentarios:
Publicar un comentario