Dulces olas que acarician mi cuerpo,
piel mojada, empapada
quemada por el sol.
Dulces olas que acarician mi cuerpo,
cada abrazo
un beso eterno.
Granos de oro,
llenais inmensas masas de tierra
palmo a palmo,
avanzando y retrocediendo.
Como una luz
quedas prendido en en el cielo,
como un leño quemado
arrojas tus cenizas sobre nuestro cuerpo.
Despojos, migajas, bazofia
empañan tu bella figura,
tus enfados se tornan vientos huracanes
tus iras dunas.
Gigantes duermen en tus costas
perturbando tu perpetuo sueño,
cuando rompen tus barreras
arremetes contra ellos.
Dulce mar que nos cobijas
como a niños pequeños,
tiernas aguas, tierna arena
viejo recuerdo.
Las poesías sobre el mar me gustan porque puedes hacer poesías tan bonitas como estas
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